El Madrid tratará de mejorar su puntería para llevarse la Supercopa

Mourinho apostará por un equipo idéntico en el que Coentrao podría ser la única novedad.





El partido entre los dos enemigos deportivos de nuestro país arrancará un miércoles y acabará un jueves. No es que vaticinemos prórroga, que también puede ser, es que el encuentro empieza a las 23.00 horas. Casi nada. Sin embargo, y a pesar de que estemos ante un horario más propicio para el sueño que otra cosa, tiene toda la pinta de que nadie se va a dormir viendo este Barcelona-Real Madrid. Máxime después de haber comprobado hace unos días en el Bernabéu que los blancos tienen en estos momentos más argumentos para discutirle el encuentro y la eliminatoria a los de Guardiola. De hecho, la tradición de los últimos años cogió el puente aéreo: el Madrid puso el juego y el Barcelona la pegada.

Alineaciones probables:

Barcelona: Valdés; Alves, Piqué, Abidal, Adriano, Sergio Busquets, Xavi, Iniesta, Alexis, Villa y Messi.

Real Madrid: Casillas; Sergio Ramos, Pepe, Carvalho, Marcelo; Khedira, Xabi Alonso, Coentrao; Özil, Cristiano Ronaldo y Benzema.


Árbitro: Fernández Borbalán (Comité andaluz).

Estadio: Camp Nou.

Hora: 23:00 (TVE-1)

Lo de hoy es, desde luego, impredecible. Lo único que no ha cambiado en estos tres días es que el Madrid está más fuerte físicamente que el Barcelona. Eso se pudo ver en Madrid y si todo es normal también se verá el día de hoy.

Lo lógico sería pensar en un Madrid idéntico tanto en alineación como en forma de jugar, a pesar de que Coentrao puede arrebatarle a Di María el puesto como titular. Presión arriba y asfixiante para robar el cuero y percusión al tenerlo. Sin embargo, Mourinho podría sorprendernos optando por la contención en el inicio y tratando de buscar al Barça en la segunda parte, es decir, aprovechar su superioridad pulmonar en los últimos 30 minutos. Cualquiera sabe cuál es la estrategia en esta partida de ajedrez, ya que sorprender al rival es parte de la batalla. Ya se sabe que Mourinho es un enamorado de la faceta psicológica. Como psicológico sería para jugadores y aficionados del Madrid vencer en Barcelona y levantar la Supercopa en territorio enemigo. Una respuesta inmejorable para hacer buena la teoría de Mourinho y sus segundas temporadas.