La huelga agotará al Real Madrid

El parón sobrecargará aún más un calendario de por sí apretado





Salvo milagro de última hora, este fin de semana no habrá fútbol. Y todo apunta a que la semana que viene tampoco. Si así fuera, serían dos jornadas las que habría que disputar fuera de sus fechas habituales, un hecho que en pleno mes de agosto no parece tener mucha importancia. Sin embargo, esto puede suponer un verdadero quebradero de cabeza para clubes como el Real Madrid, que verán a sus jugadores sometidos a una gran cantidad de partidos en muy pocos meses.

Con la Supercopa, Liga, Copa del Rey y Liga de Campeones en disputa, el Madrid tendrá esta temporada cerca de 60 partidos en los que dar el máximo. A ellos deben sumar los internacionales europeos la disputa de la Eurocopa en junio y julio próximo en Ucrania y Polonia. Es decir, una media de 65 choques a jugarse poco más de diez meses, a una media de seis por mes. O uno cada cinco días. Por ello, preocupa que el desenlace de la huelga se pueda alargar y con él, la forma física de los jugadores se vea afectada.

En un principio, hay dos opciones para recuperar estas dos presumibles jornadas que no se van a disputar. La primera es correr todos los partidos de forma que la primera se dispute de aquí a un par de semanas. La segunda es la de dejar los partidos suspendidos para más adelante, para la última semana de diciembre y la primera de enero. Pero lo que parece claro es que las próximas Navidades habrá fútbol, con el consiguiente perjuicio para el descanso de los jugadores. Y aquí los peor parados seguramente sean los equipos en competiciones internacionales, como el Real Madrid. Porque sus futbolistas tendrán menos descanso y llegarán más tocados a los meses claves de la temporada.