En la dilatada trayectoria de José Mourinho en los banquillos, un elemento inherente a él siempre ha sido la consolidación de una base en su once tipo. Comenzando por la zaga, Iker Casillas bajo palos es una garantía total y sus compañeros lo saben. En la línea defensiva, Sergio Ramos (ya sea como lateral o central), Pepe y Marcelo están realizando un trabajo notable, que sin duda se ve reflejado en los números del equipo. El cuadro merengue únicamente ha encajado seis tantos, fruto de los riesgos lógicos que el equipo adopta en algunos choques.
En la medular, Xabi Alonso es el eje natural del equipo. El tolosarra es el catalizador de juego idóneo. Por sus botas pasa la mayoría del juego blanco, y su papel se hace realmente esencial para que el perfecto funcionamiento de la máquina blanca.
El último futbolista en completar el sexteto predilecto de José Mourinho no es otro que Cristiano Ronaldo. Los números del luso son demoledores: a los 10 tantos conseguidos en la Liga, hay que sumarle cinco asistencias, faceta ésta novedosa en el desempeño del portugués.
Pero Mourinho también cuenta con grandes jugadores fuera de esta peculiar columna vertebral. El buen momento de Higuaín, el resurgir de Kaká, el desborde de Di María, el esfuerzo de Callejón, la elegancia de Özil o la inestimable aportación de Benzema dan lugar a una parcela ofensiva de gran calibre.
Lo mismo ocurre en la mediocampo y en la zaga, donde Khedira, Lass, Carvalho, Arbeloa, Varane o Albiol sirven como alternativa para José Mourinho cuando las circunstancias así lo requieren.
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