Los árbitros son el jugador número 12 del Barça

El Barcelona aún no ha sufrido ninguna expulsión esta temporada; sus rivales ya llevan seis





En esta ocasión, nos basta con echar una mirada a los registros de expulsiones en ambos equipos.  Mirando estos datos, observamos que la primera jornada que el Madrid jugó contra diez fue frente a Osasuna, duodécima jornada de Liga. Para ese entonces, el Barcelona se había quedado en superioridad numérica hasta en tres partidos, dos de ellos quedándose el rival con nueve hombres (Sevilla y Granada). Un bagaje que no se corresponde con el rasero aplicable al Barcelona, que no ha visto una sola cartulina roja en lo que va de temporada.

Y no será porque no las haya merecido… Así cualquiera consigue premios a la deportividad. ¿Cómo no los van a conseguir si los árbitros no sancionan sus infracciones? ¿Por qué el doble rasero de los árbitros con el Barcelona y el resto? Por poner un ejemplo, una mano en el centro del campo puede suponer una segunda amarilla para Di María (frente al Rayo) y una de Busquets en la línea de gol no es penalti y expulsión (en Anoeta).

Pero eso sólo es la punta del iceberg. Seis rivales expulsados por ninguno del Barcelona es el balance que arrastran los culés. Por su parte, el Madrid ha jugado dos partidos con superioridad numérica. Contra Osasuna y contra el Atlético el pasado sábado, mientras que se ha quedado con diez también en dos partidos, frente al Levante y en la citada expulsión de Di María ante el Rayo Vallecano. ¿Casualidad?

Si les dicen que  es así, duden. Los datos invitan a ello. ¿O también es casualidad que el Barcelona haya jugado en superioridad precisamente en los partidos que más le ha costado sacar adelante? Valencia, Sevilla, Granada y Athletic de Bilbao han sufrido en sus carnes las malas intenciones del estamento arbitral, que con parcialidad ha pretendido beneficiar a los azulgrana para que lograran sumar tres puntos. Para que luego digan que el beneficiado es el Madrid. Eso es manipular, pero los datos están ahí.