Pep Guardiola marcó estilo la pasada temporada al quejarse de que un árbitro había acertado al haberle señalado un fuera de juego en la final de la Copa del Rey. Una tendencia que ahora el diario 'Superdeporte' ha querido seguir al quejarse de que el clarísimo penalti de Iborra por su mano en el área fuera señalado, pues uno de sus colaboradores comenta en un artículo que "el Real Madrid es inmensamente superior al Levante y por eso no necesitaba la ayuda de Undiano Mallenco para encarrilar la victoria. Quisiera que en el Ciutat de Valencia pitasen un penalti a favor de los levantinistas como el que le señalaron el pasado domingo en contra por las manos de Iborra. ¿Dónde estuvo la intencionalidad? Otra cosa es que estuviese más bien pánfilo, viendo caer el balón desde el cielo para arroparlo de forma inconsciente entre sus manos.
Es decir, que admiten que el futbolista acomodó la pelota con el brazo y se benefició de la acción, aunque defiende que fue sin ninguna intención. Lo curioso es que, este mismo medio, hace unos meses puso el grito en el cielo por la acción en Mestalla en la que Higuaín, supuestamente, salvó un gol con el brazo. Algo que nunca nadie ha conseguido demostrar y, ni mucho menos, probar la intencionalidad del argentino si así fuera. La cuestión es que en el caso de Iborra no hay ninguna duda y parece claro que el futbolista saca el brazo para conseguir partido de la acción, así que el penalti es inexcusable.
Además, ni cortos ni perezosos en este periódico hablan incluso de "adulterar la competición" y de que "por decreto ley el Levante se vio en inferioridad numérica y con el resultado igualado". Aunque, eso sí, no mencionan nada de que en el partido de ida Khedira fue expulsado de manera muy rigurosa por una acción de teatro de Ballesteros, quien se dejó caer ante un leve empujón del alemán. Incluso tienen el valor de pedir la roja a Ramos por su golpe a Del Horno, cuando el vasco antes le había dado un golpe previo que si llega a haberlo visto el colegiado tendría que haber sido también amarilla para el lateral.
Pero ahí no acaba la cosa. En 'Superdeporte' llegan incluso a quejarse de que Mourinho tuviera prisa por no perder tiempo de juego con el 0-1 en el marcador. ¡Hasta por querer respetar el buen juego y la legalidad le caen palos al portugués! Cada uno mira por sus intereses y el técnico en ese momento quería lo mejor para los suyos, algo perfectamente lógico que a este diaro valenciano les sirve para atizarle de manera absurda y fuera de contexto. Parece que la palabra autocrítica no está en su diccionario, de manera que prefieren acusar al árbitro de hacer bien su trabajo en vez de darse cuenta de que el único culpable de que el Levante se quedara con 10 y con un penalti en contra fue Iborra.
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