Hubo muchos madridistas que dudaron de su fichaje. Y es que los 36 millones de euros que pagó el Real Madrid al Benfica por Di María provocaron mucho escepticismo en el seno de la afición, sobre todo porque la llegada de ‘El Fideo’ iba a suponer la imposibilidad de que Silva recalase en la disciplina merengue. Pero en sólo año y medio el argentino no sólo ha demostrado ser un jugador más que válido para el Real Madrid, sino que se ha ganado con todo merecimiento la condición de titular indiscutible para Jose Mourinho.
Y ante el Racing de Santander Di María, que volvía tras una lesión que le había impedido jugar en todo el 2012, no sólo consiguió marcar (un total de once ha marcado en la competición doméstica desde que viste la camiseta blanca), sino que sumó su partido número 50. Muy pocos encuentros en comparación a los que en el futuro seguirá jugando el argentino si sigue a este mismo nivel durante las próximas temporadas.
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