Ser el fichaje más caro de la era Mourinho no tiene que ser nada fácil. Muchas son las expectativas que se pusieron sobre un Coentrao que, pese a haberse hecho conocido jugando de lateral izquierdo, en sus primeros meses como jugador del Real Madrid ha jugado casi en cualquier posición menos de esa. Mediocentro, interior derecha, lateral derecho, extremo izquierdo…Lo cierto es que el ex del Benfica ha jugado, salvo de portero y delantero, en casi todas las posiciones que uno puede imaginar. Y eso, tratándose de un jugador nuevo, y con gran parte de la prensa en su contra por ser su entrenador quién es, hacen que sea muy difícil su adaptación.
Bien es cierto que jugar en el Real Madrid conlleva necesariamente el estar en el ojo del huracán. Cualquier fallo, y más de un jugador que costó 30 millones, conlleva comentarios de todo tipo en los medios de comunicación. Esa presión mediática, aunque Coentrao la tenía también en el Benfica, no es ni comparable a la que tiene que soportar ahora, y puede explicar algunas de las malas actuaciones que el jugador ha tenido en los últimos partidos, en especial en el del pasado martes ante el CSKA.
La competencia en esa posición de otro gran jugador como Marcelo tampoco facilitan las cosas a Coentrao, que en su debe hay que reconocerle que en la eliminatoria de Copa del Rey ante el Barcelona realizó muy buenos partidos. Su polivalencia, tan criticada por muchos, es siempre una solución para cualquier entrenador que se precie. Si Benzema necesitó dos años para empezar a demostrar todo su potencial, lo justo sería al menos darle a Coentrao el mismo plazo para enseñarle al mundo la clase de jugador que es, aunque algunos se empeñen en que, por ser un jugador de Mourinho y de Mendes, hay que ‘matarle’ en cuanto vengan mal dadas…
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