Empate fuera, clasificación en casa

Así ha sido tradicionalmente a lo largo de la historia





Un empate a domicilio con goles en el partido de ida suele ser un buen resultado. No para tirar cohetes, pero sí para ser optimistas. Así que el 1-1 logrado en Luzhiniki permite ser optimistas para el partido de este miércoles, y más si se tiene en cuenta que el Real Madrid tiene un 95% de eficacia en las eliminatorias europeas en las que empató a domicilio en el encuentro de ida. Como comentamos hace unos días, el precedente más cercano es el de la pasada campaña, cuando los merengues igualaron a uno en Gerland en la ida de octavos y sellaron su clasificación después en el Santiago Bernabéu por 3-0.

Y es que el club blanco se ha clasificado en 20 de las 21 eliminatorias en las que empató fuera de casa en la ida. Unas estadísticas reveladoras, que sin embargo, tienen un pequeño punto negro. Y con mucha relación con el fútbol ruso, pues la única excepción corresponde a la temporada 1990/91, cuando el Spartak de Moscú ganó por 1-3 en el Santiago Bernabéu después de haber empatado en la ida jugada en la capital ex-soviética. Entonces se disputaban los cuartos de final de la antigua Copa de Europa y el Real Madrid post-Quinta del Buitre se despedía de la competición.

Por eso, no debe haber lugar a las confianzas. De hecho, el CSKA de Moscú ya logró eliminar hace dos temporadas al Sevilla en octavos de la misma manera. Es decir, ganando en el Pizjuán por 1-2 después de igualar a uno en su país. Entonces el equipo era muy parecido al actual, así que los de Leonid Slutsky intentarán repetir la hazaña. Algo para lo que tendrán que ganar en el Santiago Bernabéu, campo en el que el Real Madrid ha marcado esta temporada en Champions 13 goles y encajado solo 2; ganando sus tres encuentros. Todo un reto para los rusos, sin duda.