El portugués quiso acalarar que no estaba criticando o menospreciando a la afición del Real Madrid, sino que lo único que quería hacer era intentar involucrar más al público madridista en los partidos: "No es una crítica a la afición del Madrid; simplemente recomiendo al público que sea más entusiasta. Me gustaría ver un Bernabéu que 'rugiera todos los partidos', que atemorizara al rival desde el minuto 1", dijo el portavoz de Mourinho.
Además quiso pedir disculpas a todo el madridismo: "Si esto se ha entendido como una crítica hacia la afición del Real Madrid, me gustaría pedir disculpas", finalizó.
Lo cierto es que anoche el Bernabéu, no presentaba su aspecto normal en una noche de Copa de Europa. Ni se llegó al lleno ni el público asistente estuvo tan 'caliente' como acostumbra en las noches europeas. El rival y el resultado de la ida no invitaban a ello.
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