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Poco importante que el sábado el conjunto azulgrana ganara con facilidad el sábado en el Sánchez Pizjuán. Con el triunfo por 0-2 se ponía a 7 puntos del Real Madrid, una distancia todavía muy amplia a la espera de que los blancos disputaran su díficil encuentro ante el Málaga. Los de Manuel Pellegrini llegaban este fin de semana al Santiago Bernabéu como cuartos clasificados, lo cual daba esperanzas al barcelonismo de poder "pescar" algún punto en esta ocasión. Algo que ha terminado por pasar, aunque de manera injusta según lo visto sobre el terreno de juego.
Así, los blancos han dejado las diferencias respecto al Barcelona en 8 puntos. Con 71 puntos son líderes claros de la clasificación, cuando ya solo restan once jornadas para acabar el campeonato. De hecho, la próxima semana va a ser vital para ir definiendo el campeonato, ya que se disputará dos jornadas de gran importancia. El miércoles el Real Madrid visitará al Villarreal, mientras que el sábado recibirá a la Real Sociedad. Si consiguiese ganar estos dos partidos, nadie dudaría entonces de que el Madrid ya tendría la Liga cogida de una de sus asas. Serían ocho o más puntos de ventaja a falta de disputarse solo 27... así que solo una hecatombe impediría lograr un nuevo título para las ya repletas vitrinas merengues.
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