El colegiado inglés, de 40 años, es árbitro internacional de la FIFA desde el año 2005 y cuenta con un gran prestigio que le llevó, aparte de dirigir la final de la última Copa del Mundo, a arbitrar hace dos temporadas la final de la Liga de Campeones disputada entre el propio Bayern y el Inter de Mourinho en el Santiago Bernabéu. En 2010 fue elegido por la IFFHS como el mejor árbitro del mundo.
No obstante, los españoles no guardan un buen recuerdo de él debido a la permisividad que existió para Holanda en la final de Sudáfrica. Especialmente puede hablar de esto Xabi Alonso, que recibió una patada de De Jong en el pecho viendo como el centrocampista oranje se iba de rositas.
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