Este miércoles partieron los mismos que ganaron en el Camp Nou menos uno. Y es que Fabio Coentrao no fue esta vez el elegido para ocupar la banda izquierda, a pesar de haber sido el que habitualmente lo hacía en las grandes citas del equipo. El portugués fue muy criticado por su actuación el choque de ida en Múnich, pero se resarció en el encuentro del pasado sábado ante el Barcelona en el Camp Nou. Sin embargo, el de este 25 de abril era un partido distinto para él, especialmente por un detalle.
Y es que el luso estaba a una tarjeta amarilla de ser sancionado y perderse la hipotética gran final de Múnich de próximo 19 de mayo, así que es posible que Mourinho haya querido protegerle de esta posibilidad. En su lugar ha estado Marcelo, habitual inquilino de la banda zurda merengue en los partidos de menor trascendencia y hombre clave en el choque. La habilidad técnica del brasileño prometía ser importante para romper la frágil zaga alemana, algo que se confirmó gracias al buen partido que jugó el brasileño. La pena es que al final ninguno de sus compañeros pudo aprovechar sus grandes acciones para clasificar al equipo.
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