Karanka, mucho más que un 2º entrenador

El vasco celebra su segundo aniversario como técnico ayudante de Mourinho





 

 

Han sido dos temporadas duras y complicadas, pero en las que Karanka ha tenido la oportunidad de vivir de primera mano cómo es la presión de entrenar a uno de los clubes más importantes del mundo. Él ya conocía la estructura interna del Real Madrid después de haber estado en el club entre los años 1997 y 2002, pero ahora es cuando está viviendo la experiencia desde el otro lado, el banquillo. Y es que José Mourinho le escogió como ayudante pocos días después de su contratación a sabiendas de que conocía a la perfección el Real Madrid y de que se trataba un entrenador joven que empezaba a destacar en la selección española sub-16.

De todas formas, ser segundo entrenador de José Mourinho no implica ser un técnico ayudante común. Porque al portugués le gusta delegar mucho en su mano derecha, tanto dentro del vestuario como fuera de él. Para el de Setúbal su cuerpo técnico juega un papel vital en los clubes en los que está, teniendo cada persona un papel propio. Así, Karanka ha tenido en estos dos años la oportunidad de ocupar la silla de Mourinho en las ruedas de prensa en cerca de 50 ocasiones. Unas veces por evitar la polémica, otras por darle protagonismo al vitoriano, Aitor ha sido uno de los grandes protagonistas en los inicios del actual proyecto merengue.


Dos años después del inicio de esta reválidad, se puede decir ya que Karanka tiene madera de gran entrenador. A sus 38 años está aprendiendo día a día de la mano del mejor en esta profesión. Quien, por cierto, ya ha dejado claro que le encantaría trabajar con él en el futuro, una vez que ambos quedaran desvinculados del Real Madrid. No en vano, el ex jugador ya ha convencido a José en este tiempo, demostrándole que es un hombre de confianza que se ha sabido adaptar a la perfección a su estilo de trabajo. A tanto ha llegado la cosa que el propio Mou ya le ha cantado a modo de broma el "Karanka portugués"... Y es que el mejor entrenador del mundo necesita a su lado al mejor ayudante del mundo, y Aitor se ha ganado a pulso el serlo.