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A lo largo de todo el curso, dio la sensación de que Marcelo sería el lateral titular del equipo (más aún cuando Coentrao comenzó la temporada jugando de centrocampista) y en cuanto a minutos así lo fue. El brasileño contó con muchas más apariciones que su homónimo, llegando a jugar un total de 3.511 minutos entre todas las competiciones con el Real Madrid. Números que dejaron atrás a un Coentrao que jugó más de 1.300 minutos menos, un total de 2.230. De hecho, la afición recriminó al portugués su coqueteo con el tabaco durante una fiesta, un hecho con el que cargó en la segunda mitad de la temporada.
Sin embargo, Coentrao remontó y mostró sus credenciales cuajando buenas actuaciones en partidos importantes, especialmente fuera de casa. Fue titular en partidos de la talla del derbi del Calderón, el clásico del Camp Nou o la ida de semifinales de la Champions, en el Allianz Arena ante el Bayern. De este modo, se erigió como el carrilero de Mou para las ocasiones especiales. El reparto de Mourinho dejó claro que defensivamente confía más en Coentrao, pero no evidenció que Marcelo sea titular y Coentrao suplente ni tampoco lo contrario. Fue un reparto de lo más justo. ¿Qué ocurrirá la próxima temporada?
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