La atracción 'fatal' del Real Madrid

El club blanco ya vuelve a ser el imán de futbolistas que ha sido a lo largo de toda su historia. Los mejores futbolistas siempre han querido vestir la elástica merengue, y hoy en día esa tendencia continúa. Especialmente este verano estamos viendo varios casos de jugadores que desean recalar en el Santiago Bernabéu y que para ello están apostando fuerte. Tanto jugadores de primer nivel como jóvenes promesas que quieren formarse en la Fábrica están haciendo todo lo posible por que sus clubes les permitan cumplir un sueño, el de formar parte del club de fútbol más importante del planeta, a pesar de las innumerables piedras en el camino.

El caso más llamativo lo estamos viendo en el croata del Tottenham Luka Modric. El futbolista tiene ofertas de otros clubes de primer nivel, como el Chelsea o el PSG. Sin embargo, su prioridad siempre ha sido el Real Madrid y no dará un solo paso en otra dirección que no sea Chamartín. Al menos mientras el Madrid mantenga su compromiso de buscarle las cosquillas a Daniel Levy. Por el momento, el mediocentro continúa sin entrenar con el equipo después de negarse a viajar de gira. En cualquier caso, Modric no es el único. En Italia Maicon está viviendo un caso parecido, ya que se ha negado incluso a jugar la Europa Leagüe, hecho que le conllevará una fuerte multa. El brasileño, que pudo cerrar su salida al Chelsea, sigue esperando la llamada de Mourinho y no tiene previsto firmar con otro club hasta que la situación no sea insostenible.

Por si esto fuera poco, los que siguen echando pestes sobre la cantera del Madrid deberían fijarse en la cola que hay para ser futbolista de la Fábrica. Tres casos llaman la atención este verano: el de Borja García, ya resuelto, el de Jaime Sánchez y el de Jota. El primero hubo de pedir públicamente que le dejaran marchar, algo que el Córdoba hizo relativamente de buena gana. Sin embargo, los otros dos siguen peleando con sus clubes para que les dejen aprovechar la oportunidad que les da el Madrid. Jaime Sánchez lleva ya casi dos semanas sin entrenar con el Cádiz, a la espera de que el club acepte negociar con los blancos. Por su parte, Jota rechaza otra salida que no sea un traspaso al Real Madrid Castilla pese a que podría quedarse todo el año sin jugar. Parece evidente que todos ellos son rebeldes con causa: con la justificación de no dejar pasar un tren que sólo se presenta una vez en la vida... Una atracción que, de no concretarse en un traspaso, puede significarles graves perjuicios.