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Mourinho habló de una derrota “muy merecida” porque “hicimos un partido pésimo, en este momento no tengo equipo”, afirmó. El técnico blanco apuntó directamente a sus jugadores al analizar la derrota: “El espíritu colectivo está fallando. Sólo hay dos o tres cabezas que no están como el resto. Hay pocas mentes comprometidas y con concentración, de las que piensan que el fútbol es el centro de su vida. Yo soy el entrenador, y por eso es culpa mía que esto no suceda”; argumentó Mourinho.
Cuestionado por la posibilidad de que todo lo que se ha estado hablando de Cristiano Ronaldo hubiera influido en el equipo, Mourinho aseguró que no es el caso: “Jugamos igual de mal que ante Valencia, Granada y Getafe y no se hablaba de este tema”, afirmó.
“Hice dos cambios en el descanso, pero cambiar a siete. El fútbol debería permitir más cambios. Di María y Özil no estuvieron peor que otros que no salieron”, comentó Mourinho cuando le preguntaron por las sustituciones del argentino y el alemán.
Analizando el comportamiento de los suyos, Mourinho vio “un equipo sin concentración y sin capacidad mental para el sufrimiento. Los jugadores del Sevilla pelearon cada pelota como si fuera la última, con perfecta agresividad. Nosotros sólo hemos hecho eso esta temporada ante el Barcelona”, sentenció el portugués.
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