El centrocampista del Real Madrid Luka Modric sigue dando pasos en su trayectoria en el equipo blanco. Después de comenzar su andadura merengue con la Supercopa bajo el brazo y con titularidad ante el Granada, en los últimos partidos el croata había visto cómo otros compañeros salían a jugar mientras él estaba en el banquillo. Esta situación se había repetido especialmente a domicilio, ya que ni en Getafe ni en Sevilla el balcánico fue titular.
Sin embargo, Mourinho decidió que en Vallecas llegara el turno de Modric. Primera titularidad a domicilio del flamante fichaje del Real Madrid, que respondió a las expectativas cuajando un brillante encuentro en los 65 minutos que tuvo en el siempre complicado derbi ante el Rayo.
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