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La parcela problemática del Madrid será la defensa, donde el técnico no dispone de ningún lateral zurdo de la primera plantilla para las próximas dos-tres semanas. Por eso, el portugués tendrá tres posibilidades para paliar estas bajas: reposicionar a uno de los jugadores del equipo de los que dispone, emplear a un hombre de la cantera (Nacho Fernández) o cambiar de táctica pasando a un 5-3-2 que aumente la solidez defensiva. Sin embargo, el hecho de jugar este fin de semana en casa podría implica que Mourinho asumiera más riesgos de los habituales.
Así, en principio mantendrá inamovible la pareja de centrales Pepe y Ramos; mientras que el ghanés Essien podría ocupar el lateral diestro y el canterano Nacho Fernández colocarse en la izquierda. Esta es la opción más favorable para el sábado; sin descartar otras como la de emplear a Ramos en la derecha colocando a Albiol junto al portugués Pepe. Las combinaciones son múltiples y solo Mourinho conoce la solución del rompecabezas horas antes del partido. Por eso, la solución elegida no se conocerá hasta, aproximadamente, las cinco de la tarde.
En el centro del campo Khedira será baja tras haber tenido molestias toda la semana. Así que Modric podría ocupar su puesto junto a Xabi Alonso, de forma que el Tolosarra ocupe el lugar del pivote defensivo. Y en cuanto a la mediapunta, previsiblemente Kaká le de descanso a Özil tras la dura semana que ha vivido el teutón con su país.
En ataque el único fijo es Cristiano Ronaldo. El portugués ha venido 'hambriento' tras no marcar con su selección y volverá a ser el gran referente ofensivo de los merengues. Junto a él, Di María y Callejón pelearán una de las plazas y Benzema e Higuaín la otra. El 'Pipa' parte con ventaja respecto al galo a pesar de que los dos terminaron tocados sus últimos partidos. Y es que Mourinho podría reservar al de Lyon pensando en su mayor utilidad para el choque del miércoles en el Westfalenstadion.
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