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El capitán del Real Madrid fue un muro ante el Celta de Vigo, volviendo a realizar paradas de mérito a balones casi imposibles tan habituales en él que cuando no las hace se le acusa de bajo rendimiento. Si bien es cierto que esta temporada podría haber hecho algo más en alguno de los goles encajados, no es menos cierto que unos cuantos errores no deben empañar una trayectoria inmaculada. Casillas sabe que se tiene que poner las pilas, y ante el Celta demostró que va camino de ello especialmente con una intervención 'milagrosa' a un remate de Park Chu-Young.
El de Móstoles mantiene una media de 0,87 goles encajados por partido en Liga que pretende reducir, más aún tras ver lo ocurrido el pasado sábado en Riazor. Los cuatro goles que el Deportivo le hizo al Barcelona sitúan a Casillas con una ventaja clara con respecto a Víctor Valdés, ganador de los últimos cuatro premios Zamora. El catalán ha encajado once goles por los siete del madridista (1,37), una diferencia que deja a Casillas en el podio de la clasificación de los menos goleados, sólo por detrás de Willy Caballero (0,62 goles por partido) y Aouate (0,86 goles con un partido menos).
De este modo, el Zamora de la temporada 2012-13 se ha puesto a tiro de Casillas, que no había visto a Víctor Valdés en una situación tan desfavorable nunca. Y es que el FC Barcelona no había encajado once goles en las ocho primeras jornadas desde la temporada 2002-03, un año en el que Víctor Valdés todavía no era titular indiscutible bajo los palos del Camp Nou. Aún queda mucho por delante, pero Iker ya mira con ilusión la posibilidad de reivindicarse con otro premio ante todos los que han osado dudar de su calidad.
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