Después de ceder el pasado sábado en su feudo en el derbi ante el Schalke 04 (1-2), el equipo germano está ya a 12 puntos de su gran rival, el Bayern de Múnich. El conjunto de Jupp Heynckes está realizando el mejor comienzo de temporada de la historia en la Bundesliga, lo que unido al mal arranque del Borussia les ha dejado ya prácticamente sin opciones para conseguir su tercer título consecutivo. En consecuencia, al equipo de Westfalia se está viendo obligado a fijarse en otras competiciones para salvar una campaña de la que todavía quedan 7 meses por jugarse.
La principal de todas ellas es la Liga de Campeones. El Borussia ocupa en estos momentos el segundo puesto del llamado 'grupo de la muerte' del torneo, pues con 4 puntos está a 2 del Real Madrid y le saca 3 al Manchester City. En un principio todas las quinielas les colocaban como el gran sacrificado de esta fase, pues uno de ellos quedará fuera junto a, previsiblemente, el Ajax de Ámsterdam. Pero su gran empate de hace tres semanas en Manchester (1-1) le ha dado la vida y ahora le permite soñar con una clasificación histórica para octavos.
En consecuencia, la visita del Real Madrid al Signal Iduna Park será clave. En caso de ganar, el conjunto 'fosforito' se pondría a la cabeza del grupo y asestaría un golpe clave para pasar el corte. Se puede decir que el Dortmund se jugará media temporada en este choque, dado que más allá de la Champions solo parece tener opciones claras en la Copa. La cuestión es si el equipo podrá dar el nivel de las dos últimas temporadas o vuelve a dar la de arena. Y es que en sus cinco últimos duelos solo ha vencido en uno y en la Bundesliga aún no ha ganado ni un solo partido a domicilio. Por eso, intentarán hacer del Westfalenstadion un fortín. Un campo donde, por cierto, el Madrid no ha ganado nunca (ha empatado en los dos precedentes). Factores que hacen del choque un arma de doble filo para los de Mourinho: ganando el liderato estaría virtualmente sellado; perdiendo todo quedaría en el aire...
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