'Tiro al blanco' de Gianluca Rocchi

El colegiado italiano masacró al Real Madrid en el Etihad Stadium





La prueba más evidente del mal criterio del colegiado en el encuentro fue que Zabaleta terminara el encuentro después de cometer hasta cuatro acciones que deberían haberle sancionado con cartulina. Mientras tanto Arbeloa o Sergio Ramos veían amarillas absurdas, en el caso del salmantino realmente dañina. Y es que el lateral derecho merengue no terminaría el partido tras la señalización de un penalti inexistente a Agüero por parte del italiano. La presunta infracción supuso la segunda amarilla para el carrilero a falta de veinte minutos y los consiguientes problemas para el Real Madrid.

Para finalizar su pésima actuación, dio cinco minutos de descuento, una auténtica barbaridad. Aunque no se pudo salir con la suya. El Madrid pasará como segundo, pero estará en el bombo de octavos de final. Por mucho que le duela a los esbirros de Platini...