Resulta complicado recordar más de dos partidos a domicilio del equipo madridista esta campaña, en los que haya resuelto la papeleta de manera holgada. Solamente las salidas a Vallecas (0-2) en la jornada 5, y a Mallorca (0-5) en la novena, fueron un ‘paseo' para los madridistas.
El resto de compromisos fuera del Bernabéu han sido más bien una película de terror: 3 derrotas ligueras ante Getafe, Sevilla y Betis, una en Supercopa ante el Barcelona por 3-2 (aunque luego se solventó en casa), una en liga de campeones ante el BVB y la cosechada en Copa del Rey ante el Celta e Balaídos.
Por ello, el Real Madrid tiene la oportunidad de dar un buen golpe encima de la mesa en La Rosaleda, para espantar fantasmas, agarrase a la liga y anunciarle al resto de rivales, que con la llegada de 2013 volverá la máquina blanca que todos conocemos.
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