Robinho cambia la cara

El brasileño ya sonrie







Igual que el cambio de tiempo (se ha pasado del frío de los 10º y de la lluvia al calor de 30º y a un sol radiante) ha alegrado la cara de todos los medios aquí presentes, la situación de Robinho parece haber dado un gira de 360º en apenas ocho días de trabajo que lleva el Madrid en Irdning. Si Robinho llegó a Austria de malas maneras, cuando estaba llamado por Dunga para ir a los JJ.OO., y con un semblante serio y triste, el brasileño, una vez iniciada su vuelta al grupo tras superar la osteopoatía de pubis, ha cambiado ese rostro de infelicidad por uno que es mucho más habitual en él: el sonriente.

Una vez que el Madrid está a punto de tirar la toalla en el asunto Cristiano, además de que la plantilla está harta de que siempre le pregunten por lo mismo, y que el Chelsea también se ha cansado de esperar a Robinho, todo hace indiciar que el diez del Madrid seguirá esta temporada en el conjunto blanco. Y esas sensaciones las transmite el propio jugador que desde que saltó con el resto de sus compañeros a los campos de entrenamiento del ATV-Irdning el pasado lunes muestra una sonrisa de oreja a oreja. Bromea con la prensa, con sus compañeros y se siente integrado en el grupo cien por cien. Y los compañeros, que saben que ha pasado malas semanas, le miman y le apoyan en todo momento. Robinho ya es el Robinho risueño de siempre.

Y todo ello influye en el juego. Ayer, en la sesión vespertina, se marcó un partidazo en el partidillo organizado por Schuster y anotó dos goles de clase, de mucha clase.


EL CHELSEA PARECE QUE SE HARTA Y NO PUJARÁ MÁS

El diario inglés "The Independent" señalaba ayer que tras ser rechazadas por el Madrid dos ofertas del Chelsea por Robinho, el equipo ha inglés ha desistido y no piensa seguir insistiendo en el brasileño. El club de Abramovich cree que los 40 millones más incentivos que ha llegado a ofrecer eran suficientes y como ha recibido un no por respuesta blanca, dado que pretende al menos 50 millones, prefiere centrar sus miradas en otros objetivos. Así, Shaun Wright-Phillips ha vuelto a entrar en los planes de Scolari y se han paralizado las negociaciones para su venta: a él era a quien iba a sustituir Robinho.