Muchos pensarán que los de Klopp no tienen suficiente potencial para lograrlo, pero su fútbol dice completamente lo contrario. Jürgen Klopp ha conseguido armar un equipo capaz de manejar varios registros; está formado para mandar en los partidos, para atacar por dentro y por fuera, pero también para esperar y tirar ‘mortales' contragolpes, gracias a la calidad de Götze, la velocidad endiablada al espacio de Marco Reus o a las subidas por banda derecha del polaco Lukasz Pisczczek.
Klopp utiliza un habitual 4-2-3-1 desde hace ya casi 3 años. El BVB ha armado un bloque que casi juega de memoria y que ha optado por darle máxima prioridad a la competición europea, para cerrar un trienio lleno de éxitos y que sería histórico para el aficionado del Westfallen Stadium. Tras el fracaso de la temporada pasada, este año consiguieron liderar un grupo con el Real Madrid, con el Manchester City y Ajax, y ‘liquidar' sin problema alguno-sobre todo en el partido de vuelta- al siempre peligroso y más que vistoso, Shakhtar Donestk.
Hummels y Subotic le dan salida y mucha calidad al equipo desde atrás, los laterales Piszczek y Schmelzer son ‘cuchillos por las alas', mientras que los dos mediocentros, habitualmente Gündogan y Bender, aportan el equilibrio perfecto. El turco alemán pone la calidad para tocar, batir líneas enemigas y descolgarse en ataque, mientras que Bender es el ‘stopper' del equipo, el hombre que hace la labor sucia para que la escuadra no se descosa.
De mediocampo hacia arriba, el Borussia Dortmund mezcla magia y trabajo. Kuba BlaszczyKowski es todo sacrificio en la derecha. Su intensidad contagia a todo el equipo, es capaz de desbordar y sus cifras goleadoras son más que interesantes. A su lado, Mario Götze se ha consagrado como uno de los mejores mediapuntas del mundo y Reus es un ‘avión' para leer los balones al espacio.
Arriba, Klopp tiene a uno de los mejores ‘9' del momento. Robert Lewandowski mezcla gol, con juego espaldas, aúna calidad con fuerza para chocar, y últimamente ha dejado a un lado su habitual frialdad para convertirse en un ariete agresivo y obsesionado con el gol. Sus cifras esta temporada lo dicen todo. 17 goles en 22 partidos de liga y 5 en 8 partidos jugados en liga de Campeones.
Quizás, al equipo de la Cuenca del Ruhr le falte una plantilla larga para luchar por Bundesliga y Champions, pero a falta de 4 partidos para la final, y viendo el estado de forma de sus estrellas, que se anden con cuidado los rivales. Este Dortmund de Klopp amenaza con repetir el éxito de aquella máquina que dirigía Ottmar Hitzfeld en el año 1997. Avisados quedan...
DEJA TU COMENTARIO