El centrocampista se retiró por precaución después de haber sentido algunas molestias, por lo que la alarma se encendió en las oficinas del Santiago Bernabéu. Sin embargo, el diagnóstico de su problema fue el de leve esguince de tobillo, de forma que el jugador del Real Madrid pudo entrenarse sin problemas en la mañana de este miércoles.
Así, se espera que el técnico Löw cuente con sus servicios para el choque que el combinado alemán deberá jugar el próximo viernes ante la selección de Kazajistán en Frankfurt.
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