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El de Setúbal desmintió por enésima vez que ya haya firmado por la escuadra inglesa, pues comentó que "ahora mismo solo puedo confirmar que tengo todavía cinco partidos de Liga por jugar más una final de Copa. Y después hablaré de mi futuro con el presidente y con José Ángel Sánchez, como amigos que somos. Nos sentaremos y hablaremos tranquilamente. El placer, honor y profesionalidad de trabajar aquí es el mismo ahora que hace un mes o dos". De hecho, aseguró que "no he tomado la decisión de si me voy o me quedo. Los primeros en saberlo serán mi mujer y mis hijos".
Al ser preguntado sobre si sus dudas vienen por el trato de la prensa, Mourinho dejó claro que "no siento la presión por parte de la prensa. No es un problema para mí. La presión solo me la pongo yo, de los clubes que he salido no tengo palabras negativas. Todo lo contrario. Y el Madrid no será distinto. Que el Madrid gane la 'Décima' siempre será una alegría para mí". Aunque sí dejó algún reproche más que evidente. "No conseguiréis borrar mi Liga de los récords, ni que ganamos la Copa después de 20 años. Para mí ha sido un orgullo haber sido el entrenador que ha roto con la hegemonía del Barça en España" afirmó.
En cuanto a la trayectoria del equipo en la Liga durante esta temporada, el luso indicó que "empezamos mal y tristes la Liga y lo hemos pagado. Deberíamos haber luchado más tiempo, no estar tan lejos del Barça tanto tiempo. Ahora nuestro récord de los 100 puntos no me parece fácil de batir, aunque el Barça puede llegar". Y también tuvo palabras sobre el debate en la portería, pues agregó que "debería haber traído al final de la primera temporada a Diego López. Quizás no hice lo suficiente. También debería haber sido más activo y contundente". E incluso mandó un mensaje envenenado para quien lo quiera recoger: "los problemas solo existen cuando uno piensa que está por encima del resto. Con los jugadores que se siente todos al mismo nivel no he tenido problemas".
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