El Real Madrid quiso demostrar desde el primer segundo de partido que la ‘caraja’ defensiva del segundo encuentro ya era historia. Y así fue, los blancos apretaron atrás y encontraron en ataque situaciones de tiros liberados gracias a una gran circulación de balón. Felipe Reyes tiraba del ‘carro’ con 10 de los primeros 13 puntos, 2 de 2 en triples incluido, y el equipo madridista se marchaba 10 arriba 10-20 tras un 2 1 convertido por Gustavo Ayón. Solamente los triples de Valencia Basket, liderado por un gran Guillem Vives, mantenían a los locales en el partido al final de los primeros 10 minutos (18-26).
Pero todo lo bueno que el Madrid hizo en el primer acto lo tiró por la borda en el segundo. El nivel defensivo seguía siendo aceptable pero en ataque el equipo se atascó absolutamente. Los cambios defensivos maniataron a un Madrid que anotó siete puntos en los primeros siete minutos de cuarto. Valencia empatada a 30 pero Carroll rompía la sequía con un gran triple (34-36). La dirección del ‘Chacho’ dejó mucho que desear y los ‘taronja’ consiguieron irse al descanso con ventaja (40-39).
Pocos esperaban una segunda parte de partido como la vista hoy en la ‘Fonteta’. El Madrid tocó fondo en el inicio del último cuarto (74-64), pero la calidad individual volvió a ser determinante. Los blancos eran incapaces de defender el juego exterior valenciano, y Harangody se hacía fuerte penetrando, doblando y anotando desde fuera, pero Felipe Reyes, cual ‘hormiga’ reina limaba, punto a punto, la diferencia local hasta poner el 88-88. La última posesión del partido era para Valencia Basket, Harangody anotaba de 3, la ‘Fonteta’ se venía abajo pero la canasta estaba fuera de tiempo y nos fuimos a la prórroga.
El tiempo suplementario fue un ejercicio de supervivencia. Lastrados por las faltas, ambos equipos innovaban sistemas. El Madrid se ‘agarraba’ al talento individual del ‘Chacho’ (5 puntos en la prórroga), pero Vives metía otro triple para poner el 100-100. Esta vez, la última era para el Madrid, y Don Sergio Llull ‘clavaba’ un triplazo con Nedovic en la cara y le daba al equipo blanco un punto que puede decidir media eliminatoria. El jueves, más y mejor con el cuarto acto.
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