El Valencia sigue llorando: ¡dice que falsificaron la firma de Laso!

El equipo taronja se resiste a aceptar su derrota en las semifinales


Carles Durán




Con esta intención presentaron un recurso por alineación indebida ante el juez disciplinario de la ACB y el Comité de Apelación de la FEB, aunque los dos fueron desestimados y archivados. Por eso ahora el club está preparando la documentación deportiva para recurrir al Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAD) en lo que se puede considerar como una medida exagerada y desproporcionada. De hecho, a tal extremo han llegado en sus quejas que incluso aseguran que alguien falsificó la firma de Pablo Laso para corregir el acta al descanso del partido, de forma que la participación de Slaughter fuera 'legal'.

"Lo peor de todo es que en el descanso cambiaron el acta falsificando la firma de Pablo Laso. No creo que el Real Madrid esté en la final por tema arbitral, yo creo que deportivamente fue superior, pero también es cierto que hubo un jugador que disputó el tercer partido ilegalmente y no tendría que haber jugador" ha explicado el técnico del Valencia, Carles Durán, en declaraciones para la Cadena SER. "A partir de ahí pienso, ¿y si me hubiese pasado a mí?, ¿y si mi delegado no revisa el acta y firmo? ¿qué me hubiera pasado a mí? ¿El presidente estaría contento? No sé, no lo sé. Lo que creo es que no han sido muy parciales, es mi opinión".

Además, Durán fue más lejos y explicó que está "muy contento por todos los equipos de España, sobre todo los de formación. Ahora cuando firmen un acta en la que haya un error lo podrán justificar y no le darán un partido por perdido 2-0". Sin embargo, por mucho pataleo que protagonizan y por mucho tiempo que pierdan sus opciones de conseguir que el partido se repita son mínimas. Y es que la clave de este asunto es que el error no lo cometió el Real Madrid, sino un comisario de mesa; además de que Slaughter es un jugador que está inscrito en la ACB y que el club blanco solicitó emplear en el partido. Así, fue un mero fallo formal que no debe adulterar la competición ni evitar que la misma transcurra con normalidad, diga lo que diga el club valenciano.