No solo en la sección de fútbol este método está funcionando. También en el Real Madrid de baloncesto son varios los jugadores que han salido cedidos a otro club y que han vuelto al Palacio después de demostrar que son jugadores válidos para defender la camiseta del mejor equipo de Europa. El ejemplo más reciente es el de Guillermo Hernángomez. El pívot se fue cedido hace dos años al Sevilla y tras realizar grandes temporadas, el club merengue ha decidido que vuelva a casa.
Willy es uno de los jugadores con más futuro del baloncesto europeo, pero cuando se marchó cedido apenas tenía 18 años. En el Real Madrid, quizá, no hubiera tenido el protagonismo que sí ha tenido en el equipo andaluz y que le ha permitido crecer y ser un jugador mucho más completo y dominante. Ahora tiene la oportunidad que siempre ha soñado, la de jugar con los Felipe Reyes y compañía y optar a ganar el máximo de títulos posibles.
Otro caso parecido al de Hernangómez es Dani Díez. El alero salió cedido en la temporada 2012 al Lagun Aro, su buena temporada en el equipo guipuzcoano le sirvió para que un año más tarde, el internacional español regresara al equipo de Laso. Esta misma operación se esta realizando con otros jugadores. El Real Madrid seguirá de cerca las evoluciones de Santiago Yusta en el Obradoiro para acometer su posible regreso en un futuro y con Barreiro están a la espera de decidir que hacer con él, pero parece que su destino será el UCAM Murcia.
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