El Carpena pone a prueba el ciclo victorioso del Real Madrid

El Madrid inicia la conquista de otro título con la baja segura de Taylor y la duda de Rudy Fernández


El Real Madrid pondrá este viernes en juego la Supercopa de España




Sólo unas horas después de la disputa de la primera semifinal entre el Barcelona Lassa y el Gran Canaria el pabellón malagueño se pondrá de gala para albergar un partido de nivel Euroliga. Frente a frente estarán el histórico Real Madrid de los cinco títulos y el Unicaja Málaga, un equipo siempre peligroso que la temporada pasada ya puso en muchos aprietos a culés y madridistas. Y todo ello sin olvidar que estos dos equipos ya se vieron las caras hace unos días en el Torneo Costa del Sol, si bien ambos tenían múltiples bajas en sus plantillas. Entonces el vencedor fue el equipo verde tras un final de 'infarto'.

Por su parte, los andaluces aprovecharán su regreso a una Supercopa nueve años después de la última vez para ponerse de largo ante su afición tras un intenso verano en el que han modificado prácticamente la mitad de su plantilla. Y es que Joan Plaza contará mañana con sus nuevas incorporaciones - Richard Hendrix, Nemanja Nedovic, Jamar Smith, Edwin Jackson, Dani Díez y el canterano Alberto Díaz -, así como viejos conocidos como Fran Vázquez, Kuzminskas o Germán Gabriel.

Sin duda será una prueba de primer nivel para el Real Madrid. Sobre todo si se tiene en cuenta al equipo blanco llega a la cita algo corto de preparación y de efectivos, ya que los internacionales del equipo sólo llevan una semana entrenando a las órdenes de Laso y probablemente tendrá que afrontar el torneo con dos importantes bajas. La del escolta Jeff Taylor es segura por un problema en sus isquiotibiales, mientras que la participación de Rudy Fernández será seria duda hasta el último momento. El balear arrastra importantes dolores en su espalda desde hace semanas y el consejo médico es que no fuerce estos días en Málaga para poder afrontar el inicio de liga en óptimas condiciones.

Así pues, el técnico vitoriano ha preparado el partido con la idea de contar únicamente con 10 jugadores, lo que ya es de por sí un hándicap para intentar conquistar el que sería el sexto título consecutivo del equipo. A la plantilla no se le escapa que la temporada perfecta que logró el Real Madrid será ahora una presión añadida para todos, ya que cualquier error podría verse como un paso atrás. Sin embargo, los jugadores merengues son los primeros que saben la importancia de no subestimar a los rivales, por lo que este viernes saltarán a la pista con la máxima concentración para afrontar el ambiente 'infernal' que les espera en el Carpena. En juego estará una previsible final el domingo ante el Barcelona, lo que además les acercaría a la conquista de su tercera Supercopa consecutiva. Razones de sobra para no dejarse sorprender y hacer valer su condición actual de 'campeón de todo'.