El Real Madrid llegaba a Moscú con las vitales bajas de los lesionados Rudy Fernández y Sergio Llull y con la historia en contra, ya que allí había perdido en sus últimas cinco visitas. Sin embargo, este jueves no se ha podido acabar con esa mala racha y, para colmo, después de un último cuarto más que malo se ha llevado una paliza que complica el ‘average' en caso de empate final en la clasificación con los rusos.
Pese a que el Real Madrid pareció comenzar enchufado en el primer periodo, llegando incluso a dominar por 10-16 cuando se habían jugado seis minutos, la historia cambiaría por completo. El CSKA empezó a machacar al Real Madrid con un ataque imposible de parar a lo que se unió la aparente desgana de más de un jugador en determinadas fases del encuentro. Con esto arrancó el segundo cuarto con un 22-20 que, a pesar de todo, dejaba soñar con la victoria.
Sin embargo, no había nada más lejos de la realidad, ya que en el segundo periodo los locales, animados por un público que abarrotó como es habitual las gradas del pabellón, comenzó a poner tierra de por medio con un parcial de 28-21 que llevaba el partido al 50-41 al descanso. El Real Madrid pareció reaccionar en el tercer periodo, pero de nuevo el CSKA apretó en ataque para dejar la diferencia a falta de diez minutos en un 71-64.
El último cuarto comenzó con una defensa más intensa del Real Madrid que solo duró un par de minutos y luego se diluyó hasta permitir al CSKA anotar hasta 24 puntos y firmar una victoria por 95-81, su primer triunfo en el Top 16. El ‘Laso Team' se queda, al igual que los rusos, con una victoria y una derrota después de dos jornadas. El próximo viernes tocará recibir en el Palacio a Zalgirs, aunque antes habrá que recibir al Baloncesto Sevilla en ACB el domingo.
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