El partido comenzó con la igualdad que se podría esperar en un partido en el que se enfrentan dos de los mejores equipos de Europa. Tanto Madrid como CSKA salieron a la pista con cierta timidez y dispuestos a medirse mutuamente antes de empezar a arriesgar. Así que en los primeros compases el protagonismo fue para el juego interior, con Ayón y Freeland acaparando el juego en las dos zonas (6-6, min.4). Las dos defensas se imponían sobre los ataques, por lo que el primer cuarto siempre se movió en unas diferencias cortas que propiciaron varias alternancias en el marcador. Aunque, curiosamente, estos diez minutos llegaron a su fin con una igualdad máxima sobre el parqué (18-18, min.10).
El siguiente parcial continuó en sus inicios con la misma tónica vista en el comienzo. El CSKA supo aprovechar magníficamente la irrupción en el partido de Hynes, quien se convirtió en el amo y señor del juego ofensivo de los suyos. Hasta diez puntos consecutivos hizo el norteamericano para apretarle las 'tuercas' a los de Laso (25-28, min. 16), aunque el Real Madrid no perdió en ningún momento la cara al partido en estos momentos de marejada. Los campeones de Copa se aferraron a duras penas al marcador, incluso cuando Teodosic asumió el mando en los últimos instantes de la primera parte (30-39, min.19).
Los triples decidieron el partido para los visitantes
El serbio empezó a ver con acierto el aro desde la línea de tres puntos, pero la 'garra' de Ayón y Felipe y un triple postrero de Llull cuando el segundo cuarto moría permitieron que el Madrid se fuera al descanso con motivos para el optimismo a pesar de la desventaja (37-42, min.20). Así, el equipo salió con ganas en la reanudación y fruto de esta intensidad Felipe forzó la cuarta falta de Freeland, lo que suponía un duro varapalo para el juego interior moscovita. Sin embargo, el CSKA continuó anotando con comodidad, por lo que los blancos se vieron obligados a llamar de 'emergencia' a Carroll.
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El escolta anotó dos triples seguidos para mantener al Madrid en el encuentro (47-50, min.25). Los blancos remaban, pero necesitaban un impulso más. Y se lo sorprendentemente se lo dio Hynes, quien perdió los papeles tras machacar el aro merengue y cometió una falta técnica que fue aire puro para el conjunto español (52-52, min.26). Pero el CSKA no se dejó intimidar y continuó sumando constantemente cual 'martillo pilón' (56-60, min.28). Aunque por fortuna el choque ya era un duelo de poder a poder, de forma que Llull y Sergio Rodríguez igualaron la apuesta de su rival para entrar en el último cuarto con todo por definir (62-64, min.30).
El cuarto final no empezó bien para los blancos. Teodosic volvió a destapar el 'tarro de las esencias' y sumó 5 puntos para los suyos que hicieron daño al Madrid (65-71, min. 32). Además, para colmo De Colo y Higgins también se apuntaron a la fiesta con otros dos triples más y pusieron el partido más cuesta arriba que nunca (68-80, min.34). La sangría se estaba produciendo claramente en el juego exterior, pues el equipo de Laso se veía incapaz de frenar los triples 'rojos' mientras que en ataque sudaba para anotar cada punto.
De esta forma el partido poco a poco fue llegando a su fin mientras el Barclaycard Center contemplaba la escena con impotencia. 87-96 como resultado final, 5-4 como balance en el grupo y la incomodidad de saber que se han escapado ya tres partidos de casa en este Top-16. Tocará sufrir hasta el último segundo.
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