Victoria trabajada para empezar con buen pie en Europa

El Real Madrid venció (83-65) a Olympiacos en su estreno en la Euroliga con un gran Sergio Llull


Real Madrid, Olympiacos

Real Madrid-Olympiacos




Llull juega a otra cosa (24-17)
Comenzó la nueva era de la Euroliga, con el partido que todo lo inició, un triple de Spanoulis servía para inaugurar el marcador del partido y una buena canasta de Llull hacía lo propio con el electrónico madridista. El festival del menorquín seguía con dos triples que hacían levantar a la afición de un Palacio lleno hasta la bandera.

Varias decisiones arbitrales no gustaban a la parroquia blanca, mientras, Spanoulis castigaba desde el triple y Papanikolau ponía por delante a los griegos, que no daban ni un centímetro a los de Pablo Laso. Taylor desde su esquina se mostraba infalible de tres, la buena defensa en grupo del Real Madrid, la astucia y los triples de Llull, que se ponía con quince puntos, ponían siete arriba a los blancos.

El cuarto acabó con ovación para un Llull estratosférico y con Olympiacos que intentó reducir desde el triple, pero sin acierto, ese que tuvo Llull y no el marcador, siempre a remolque del partido.

Olympiacos no se iba a rendir (42-40)
En el segundo cuarto iba a dejar claro que Jeff Taylor sería la sombra de Spanoulis, si el griego iba al banquillo, Taylor también. La pelea en la zona de ataque del Real Madrid era muy intensa, Randolph y Hunter se pegaban con los pívots de Olmpiacos y en defensa cualquier contacto era castigado con falta.


Un parcial de 5-0 a favor del Real Madrid, con canastas de Draper y un triple de Doncic volvían a distanciar a los de Laso (31-23) y obligaba a Sfairopoulos a pedir tiempo muerto. Dio resultado, el equipo del Pireo endosó un parcial de 2-7 y se volvía a meter en el partido. Un mate tremendo de Randolph, con la mano izquierda y decisión al aro levantó al público del asiento. Una buena jugada a la contra de Doncic con asistencia a Felipe Reyes, llevaba los primeros puntos del capitán en el partido.

Se veía un Real Madrid en defensa muy aplicado, metiendo manos por todos lados y ayudando en el uno contra uno; solamente los árbitros con sus faltas eran capaces de parar esa buena defensa. El partido se iría al descanso con un canastón de Spanoulis sobre Jeff Taylor, dejando el partido muy abierto para la segunda parte.

El cuarto de la defensa (62-53)
Olympiacos
conseguía la igualada en el marcador con una bandeja de Printezis, el Real Madrid cargaba su juego en el interior de la pintura con Ayón, quién sacaba las faltas a sus defensores. Una carrera de Llull a la contra provocó la antideportiva de Spanoulis, convirtiendo los dos tiros y aprovechando la posesión para los primeros puntos de Thompkins.

El partido se estaba jugando en las defensas, al Real Madrid le costaba anotar, Rudy intentaba varias jugadas individuales, aunque sin éxito; pero tampoco concedía, Taylor era una pesadilla para Spanoulis y el marcador se movía en un margen muy pequeño. De nuevo Spanoulis aparecía para sacar una antideportiva y con un triple de Agravanis, los de Sfairopoulos se ponían por delante. Poco les duró la alegría, Rudy de tres y Llull en penetración daban ventaja al Real Madrid en unos minutos de verdadera locura.

Un parcial a favor del Real Madrid de 9-0 obligaba a Olympiacos a pedir tiempo muerto, el partido entraba en una fase donde cada ataque se medía por la intensidad. Esa intensidad le sirvió a Doncic a sacar una técnica a Agravanis y transformar dos puntos más. El Real Madrid cargaba el juego interior y sacaba faltas con tiro libre para marcharse en el marcador al último cuarto.

El Real Madrid deja a Olympiacos en 12 puntos (83-65)
El Real Madrid cosechaba la máxima ventaja en el partido con un triple de Jaycee Carroll al inicio (67-56), Lojeski respondía de la misma manera y de nuevo el partido se iba al ámbito de las faltas personales, donde el Real Madrid cosechaba unos muy buenos porcentajes.

Anthony Randolph sacaba a relucir su potencia y calidad para conseguir cuatro puntos consecutivos, Doncic era le más listo de la clase al rebote y en defensa las buenas manos de Hunter daban la oportunidad de salir corriendo al Real Madrid pero sin acierto en el ataque, para muestra el tapón que se llevó Llull de Birch. El balón quemaba en las manos de los jugadores, veían el aro muy pequeño y sólo por medio de tiros libres, el Real Madrid era capaz de mantener la diferencia en diez puntos.

Los últimos coletazos del partido se vería un Real Madrid serio en defensa, minando la moral de los griegos y con un buen Luka Doncic que desde el triple ponía los trece puntos de ventaja y once puntos en su casillero. Se gustó en los últimos minutos el Madrid con un alley-oop de Doncic a Hunter y un triple marca de la casa de Llull sobre la bocina para certificar el inicio del Real Madrid en esta Euroliga con una victoria trabajada desde el principio.

Real Madrid-Olympiacos