El equipo de Laso fue claramente de más a menos en el partido. Los dos primeros cuartos fueron excelentes, con buena circulación de balón y acierto en el tiro exterior. Randolph y Thompkins eran los máximos anotadores de un Madrid que encarrilaba el partido con ventajas próximas a los 15 puntos (38-53, min.20).
Sin embargo, la segunda mitad del partido nos mostró la peor cara del equipo de Laso. Mucho desacierto en la línea de tres puntos y excesivas pérdidas de balón. Los turcos se fueron creciendo y, gracias a un porcentaje de acierto espectacular, comenzaron a acercarse peligrosamente al Real Madrid en el marcador (72-78, min.35).
El final del partido fue un cara y cruz total que, por suerte, favoreció al Real Madrid. Ayón y Tavares acertaron con sus tiros libres cuando más quemaba la pelota mientras que Douglas, que fue el mejor de los suyos, perdía una pelota decisiva que hubiera podido forzar la prórroga. Con sufrimiento, pero el equipo de Laso sumó una nueva victoria con la única mala noticia del golpe que sufrió Llull en la pierna y que apenas le permitió jugar 3 minutos.
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