Honor y orgullo: no dejan al Madrid revalidar su corona

El Real Madrid perdió ante CSKA (90-95) y quedó eliminado en un partido con mucha polémica.


Real Madrid - CSKA

Real Madrid - CSKA




En Vitoria se vivió uno de los mejores, o el mejor, partido que se puede ver en Europa. El Real Madrid y el CSKA se disputaban una nueva medalla europea en las semifinales de la Final Four. Esperaba el Anadolu Efes que pegaba el sorpasso ante Fenerbahce y se metía en la finalísima. El partido arrancó con máxima intensidad y el puntuaje fue muy alto en el primer tiempo. El partido, sin embargo, se resolvió en el último cuarto y ahí el arbitraje y un acertado CSKA terminaron por reventar el sueño madridista.

El duelo en la primera mitad fue espectacular y puede resumirse en un Tavares vs Chacho. Cuando uno brillaba, el otro intentaba superarle, y así el marcador terminó con un 43-45 muy abultado. Walter Tavares se destapaba como una auténtica bestia en el parqué y con su bagaje defensivo y en ataque destrozaba al CSKA en los primeros minutos.

Apareció la magia del Chacho y le demostró a su exequipo su habilidad. El canario se destapaba con jugadas espectaculares y agitaba el marcador poniendo a los rusos por delante en el Buesa Arena. Causeur y Thompkins, entre esa irrupción de Sergio Rodríguez, también pegaban un puñetazo sobre la mesa para permitir que el Madrid se fuese por delante en el tiempo de descanso (43-45).

En el tercer cuarto irrumpió la figura de Causeur que se colocó como máximo anotador del partido con un total de 16 puntos, hasta ese momento, y De Colo empezó a coger también las riendas de los suyos. El Madrid, on fire (18-7 de parcial) sacaba a relucir su mejor versión y cogía una distancia de +13 en la semifinal. Por momentos, también aparecía el Chacho (cuando estaba en pista) y en la última posesión cerró el periodo con un marcador de 65-73 tras un error clamoroso de Otello Hunter. Llull, con 8 décimas, no pudo meterla desde su propio campo. Todo quedaba por decidir en el último cuarto.

En el cuarto periodo las faltas empezaban a resultar definitivas. Muchas eliminaciones de jugadores al filo y el doble rasero arbitral desquiciaban a los madridistas. Hasta 3 técnicas le pitaron en contra a los de Laso. Cada rebote, cada tiro, cada falta, cada detalle valía oro. De Colo le pegaba un hachazo al Madrid, quién sabe si será su próximo equipo, con un triple a falta de minuto y medio para poner a los suyos con un +2 inédito en las semifinales. Rudy afinaba desde la línea de tiro libre. El CSKA agazapado se aprovechó de la situación y mantenía su ventaja a falta de 25 segundos.


No perdonaba Sergio Rodríguez desde la línea de tiro libre y el CSKA ya celebraba el triunfo. Remontar 4 puntos en 17 segundos se antojaba como una auténtica quimera para los de Laso. Llull clavaba un triplazo y colocaba al Madrid a un solo punto a falta de 15 segundos para soñar. Higgins hacia su trabajo desde el tiro libre y volvía a dejar el +3. En última instancia, dónde se decidía todo, Llull fallaba un triple decisivo y el CSKA en la línea de personal dejaba sin opción a los madridistas. No les dejaron revalidar título de Euroliga y ese 42-24 en faltas fue totalmente definitivo. Orgullosos de nuestros jugadores que cayeron con honor y lucharon la Undécima hasta el final. Volveremos.