“El vuelo del Estrella Roja de Belgrado no recibió el permiso de las autoridades españolas debido a las excepcionales condiciones climáticas que atraviesa España desde el viernes pasado, limitando el número de vuelos que llegan y salen del aeropuerto”, empieza diciendo el comunicado emitido por la Euroliga.
“La Euroliga evaluará con los equipos afectados las mejores opciones posibles para reprogramar el partido según las fechas disponibles y la disponibilidad de realización del mismo por parte de los titulares de los derechos de televisión. Se publicará más información al respecto en los próximos días”, ha transmitido la propia competición.
En esta ocasión la suspensión ha cogido a todo el mundo por sorpresa. No en vano, la Euroliga no lo ha comunicado oficialmente hasta las 14.30 horas de este mismo miércoles, es decir, a menos de siete horas para que se disputara el encuentro en la capital de España.
Es evidente que los estragos de Filomena siguen pasando factura en España en general y en Madrid en particular, sin embargo, hechos como este resaltan una vez más que la queja de Zidane tras el partido de Osasuna era más que razonable: nunca se debió viajar.
Además, poco después se conoció que los blancos tampoco jugarán este fin de semana su encuentro ante el Obradoiro, en este caso, por culpa del coronavirus.
La ACB ha comunicado que “el encuentro entre el Monbus Obradoiro y el Real Madrid, correspondiente a la jornada 20 de la Liga Endesa y previsto para el domingo 17 de enero (17:00), ha sido aplazado por cuestiones sanitarias derivadas del brote de COVID-19 que continúa afectando al equipo local. La acb comunicará próximamente la nueva fecha para la disputa del encuentro", señalaron. Una semana más que atípica, sin 2 partidos, para los de Laso.
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