Alberto Herreros tuvo en su mano fichar para el Madrid al ahora MVP de la NBA, Nikola Jokic

La estrella serbia estuvo a punto de fichar por los blancos


Jokic

Jokic




Tanto el club madridista como azulgrana se interesaron en 2014 en un jovencísimo pívot que estaba destacando en Serbia, según informa 'MundoDeportivo'. Ambos clubes, decidieron enviar emisarios para ver sus partidos y donde Alberto Herreros encabezó la expedición del equipo blanco.

El ex jugador del Real Madrid pudó observar la mejor versión de Jokic en el Mega Vizura, pero su irregularidad provocó que el interés descendiense y se aplazara su traspaso. Los blancos tuvieron en sus manos adquirir a uno de los mejores jugadores de la historia, pero lo dejaron pasar y acabó poniendo rumbo a la NBA.

En ese mismo año, el jugador acabó presentándose en el Draft de la NBA firmando por Denver Nuggets y el resto ya es historia. Aquel pick 41 de segunda ronda ha terminado siendo por segunda vez consecutiva el MVP de la mejor liga del mundo.

Además, 'MundoDeportivo' afirma que el club catalán estaba dispuesto a hacerse con sus servicios, pero antes de realizar la firma del contrato, un mal partido del jugador terminó echando para atrás el acuerdo. Los dos grandes clubes españoles lo tantearon, aunque ninguno acabó decantándose por él.


Un cambio físico lo llevó al estrellato

El pívot serbio, también conocido como el 'joker', llegó a la NBA pasado de peso y con un físico poco vistoso en la cancha. A pesar de que la calidad del jugador siempre fue exquisita, nunca terminó de despuntar en gran parte por culpa de su cuerpo.

Tras el parón por la pandemia, Jokic quiso ponerse manos a la obra y decidió bajar 20 kilos para competir de esta manera al máximo nivel. Y así lo hizo, desde entonces ha sido el jugador más destacado de la NBA promediando un doble doble por partido y siendo uno de los jugadores más determinantes de la liga.

Junto a este MVP, Nikola Jokic suma de manera consecutiva su segundo trofeo como mejor jugador de la temporada regular en la NBA. Desde Moses Malon en 1982 y 1983, ningún pívot había podido conseguir repetir esta hazaña.