Así, materializarían este hecho en la primera mitad del encuentro, donde el equipo de Chus Mateo realizó dos cuartos muy malos. En el primer cuarto, el conjunto blanco, a nivel ofensivo, estuvo desaparecido. En 10 minutos, apenas fueron capaces de anotar 13 puntos, para finalizar este periodo con un 20-13 a favor del Zaragoza. Se presuponía, que tras el tiempo entre cuarto y cuarto, el Real Madrid saldría con otra cara a la cancha, pero nada más lejos de la realidad.
El conjunto merengue realizó unos segundos 10 minutos peores que los primeros. A nivel defensivo se mostró muy frágil y dejó tiros liberados, además, en ataque siguió muy pobre. Esto se tradujo en un resultado de 48-36 para el Casademont Zaragoza. Así se llegó al descanso. Un descanso que debería haber sido un respiro y una oportunidad para aclarar las ideas de los pupilos de Chus Mateo, pero no fue así. El Real Madrid salió de la misma manera al tercer cuarto: sin ideas. Incapaces de recortar distancias, se fueron al último periodo 71-58 abajo en el luminoso.
Comenzaba el último cuarto del partido, con el único objetivo de remontar el resultado adverso. Pero, no fue el caso. Los pupilos de Chus Mateo, a pesar de un último arreón, no fueron capaces de encontrar su juego a lo largo de los 40 minutos del partido, esto se tradujo en una nueva derrota en la Liga Endesa: 94-89.
El equipo no arranca
El inicio de temporada no está siendo el esperado para una plantilla como la del Real Madrid, el equipo no termina de arrancar. Con esta derrota en Zaragoza, el conjunto de Chus Mateo ya suma 5 derrotas en el curso, unos números muy pobres.
Lo único positivo de todo esto, es que la temporada acaba de comenzar. El equipo tiene tiempo suficiente para recuperar la forma y las sensaciones necesarias para luchar por los buenos resultados. Es importante, que de cara a los meses decisivos, el Real Madrid presente su verdadera cara, hay equipo de sobra para ello.
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