El Barça se enfrenta en Berlín al vigente campeón

REGAL BARCELONA-CSKA MOSCÚ (18:00 H)





En la décima final a cuatro de su historia, el Barcelona intentará romper su gafe histórico (sólo ganó en 2003, en el Palau Sant Jordi) y sobre todo, y demostrar que cuenta con una plantilla preparada para ganar la Euroliga. Es uno de los grandes objetivos de la sección, después de haber formado un grupo competitivo, adornado con el regreso de Juan Carlos Navarro de la NBA.

En el entorno del equipo existe la sensación de que Navarro volvió de Memphis para disputar partidos como éste, una semifinal de la Euroliga ante el vigente campeón. En la dirección de juego le escoltarán Jaka Lakovic y Gianluca Basile, con Víctor Sada como especialista en defensa. El CSKA es el equipo con mejor porcentaje de acierto exterior (41%).

En la batalla del rebote, en cambio, el Barcelona parte con ventaja. Curiosamente, la media reboteadora del CSKA (11 capturas por partido) es la peor de toda la Euroliga. Además, Ersan Ilyasova es el segundo mejor reboteador de la competición, sólo superado por Ioannis Bouroussis (Olympiacos).

Buena parte de las opciones del Barcelona pasarán por imponer su juego interior. Cuando Daniel Santiago, Fran Vázquez y David Andersen han rendido a su nivel, el Barcelona ha tramitado sus partidos con solvencia. Andersen, que jugará su octava final a cuatro, de las que ha ganado tres, se enfrentará a su ex equipo, con el que ganó el título en Madrid hace un año.

El Barcelona intentará que el partido tenga un ritmo muy alto y que la puntuación se dispare. El CSKA se maneja muy bien en marcadores cortos (encajó sólo 54,6 puntos de media en la serie de cuartos) y sabe disputar el partido psicológico como pocos en Europa.

"Tenemos que ser rápidos en las transiciones y aprovechar muy bien los contragolpes. Hay que jugar con precaución y sin precipitarse, pero con mucha confianza en nuestras posibilidades", según Víctor Sada, que vivirá su segunda final a cuatro con el Barça.

La presencia de Ettore Messina en el banquillo rival multiplica el atractivo del partido. El italiano fue la primera opción del Barcelona para ocupar el banquillo del Palau a comienzos de la presente temporada, pero ante la imposibilidad de su incorporación, el Barcelona apostó por un técnico de la casa, Xavi Pascual, el más joven de los cuatro entrenadores aspirantes al título en Berlín.

REGAL FC BARCELONA: Sada, Navarro, Basile, Andersen, Vázquez -posible cinco inicial-, Barrett, Trías, Barton, Lakovic, Ilyasova, Santiago y Grimau.

CSKA MOSCÚ: Holden, Siskauskas, Langdon, Smodis, Lorbek -posible cinco inicial-, Zisis, Keyru, Vorontsevich, Shved, Kaun, Khryapa y Morris.

PABELLÓN: O2 World Arena.

HORA: 18.00 horas.


El CSKA de Moscú, dominador de la Liga rusa, jugará su séptima final a cuatro consecutiva. Desde la semifinal de Barcelona en 2003, en la que perdió precisamente ante el equipo azulgrana, el CSKA no ha faltado a su cita con la elite del baloncesto europeo, trayectoria que le acredita como favorito al título y que le permite preparar el partido con la experiencia como factor a favor.

Aunque ha perdido piezas importantes, como Theo Papaloukas (Olympiacos), David Andersen (Barcelona) y Tomas van den Spiegel (Real Madrid), el CSKA continúa siendo un equipo de referencia. Se clasificó para la final a cuatro en una eliminatoria exprés ante el Partizan (3-0).

El equipo ruso, con cinco jugadores (Zisis, Morris, Lorbek, Langdon y Khryapa) que han promediado 19 puntos por partido a lo largo de la competición, llega más descansado a Berlín. Sólo ha jugado dos partidos oficiales desde que se clasificó para la final a cuatro. En el perímetro, el equipo ruso cuenta con Holden y sobre todo, con Langdon. Su potencial, en cambio, se concentra bajo los aros, con Smodis, Khryapa y Lorbek, el noveno jugador de la Euroliga mejor valorado.