Paliza sin despeinarse

El Madrid se puso las botas durante los tres primeros cuartos. Lavrinovic volvió a liderar el ataque blanco. Los polacos fueron un juguete en manos de los de Messina





Le costó arrancar al Madrid en el partido. Con el motor al ralentí, los blancos permitían que los polacos del Prokom pudieran seguir la marcha merengue. Liderados por un genial Logan, los visitantes llegaron a ponerse arriba en el marcador, aunque poco tardaron los blancos en despertar del sueño a los polacos.

Ficha técnica:

94 - Real Madrid (30 21 17 26): Prigioni, Hansen (6), Garbajosa (13), Lavrinovic (19) y Bullock (15) -equipo inicial-, Velickovic (7), Vidal (10), Kaukenas (11), Llull (10), Dasic (3), Samb y De Miguel.

72 - Asseco Prokom (22 11 12 27): Logan (19), Szczotka, Burrell (14), Ewing (9) y Hrycaniuk -equipo inicial-, Brazelton, Sow (4), Kostrzewski, Jagla (4), Szcotka y Woods (22).

Árbitros: Volodymr Drabikovsky (UKR), Milivoje Jovcic (SRB) y Zdravko Rutesic (MNE). Sin eliminados.

Incidencias: Partido correspondiente a la segunda jornada del grupo D de la Euroliga disputado en el Palacio Vistalegre ante 5.800 espectadores.

Un par de broncas de Messina, la irrupción de Llull, el buen hacer en el tiro de Garbajosa y la conexión lituana formada por Lavrinovic y Kaukénas fue la Biblia a la que se agarraron los toreros de Vistalegre para poner las cosas en su sitio. No era plan de hacer sufrir más de la cuenta a un Valdano, presente en el palco de Vistalegre, que suficiente disgusto se llevó con los futboleros en Alcorcón.

En un abrir y cerrar de ojos el Madrid se puso por delante con cierta suficiencia (43-30 min.18). A los polacos se les cayó la persiana encima, y su casillero de puntos dejó de moverse al más puro estilo portero de futbolín. A la vez, las muñecas de Garbajosa (falta le hacía) y Kaukénas desempolvaban parte de la mala baba que se gastan ambos cuando tienen la línea de 6.25 justo delante de la puntera de sus zapatillas. El partido parecía visto para sentencia al descanso (51-33).

EL VERDADERO VIDAL, EN ACCIÓN


La mejor de las noticias para Messina fue el rendimiento que ofreció Vidal. El alero catalán, silencioso como pocos en el trabajo, responde al perfil de hormiguita trabajadora que da la cara por sus cuatro compañeros de cancha si hace falta. El ex del Baskonia se fajó en defensa, reboteó en ataque e, incluso, clavó un triple sobre la bocina que forzó la alegría de un Messina siempre atento al pestañeo del último de sus utilleros.

Con el partido totalmente sentenciado, Messina otorgó minutos a jugadores como De Miguel, Dasic o Samb. Sin embargo, el que aprovechó el último cuarto para engordar su tarjeta de visita fue Louis Bullock, que demostró que su idilio con la línea de tres puntos es un matrimonio para toda la vida. Una vida, la europea, que el Madrid enderezó con suficiencia tras la derrota de la primera jornada. Al menos, Valdano se pudo llevar una alegría. Falta le hacía.