Este Maccabi ya no mete miedo

El conjunto hebreo no se parece al equipo que triunfó en Europa hace años





Sin embargo, esa época de grandes victorias parece que empieza a quedar lejos para el conjunto entrenado por Pini Gershon, pues la temporada pasada el conjunto hebreo ni siquiera fue capaz de superar la fase de grupos en el Top-16. De hecho, en aquella eliminatoria se enfrentó con el Real Madrid; y el Maccabi acabó sucumbiendo en los dos encuentros con cierta claridad (98-79 en Vistalegre y 69-73 en Israel).

Por aquél entonces el otrora campeón de Europa gozaba de una plantilla superior a la actual, pues en sus filas tenía a jugadores de la calidad de Carlos Arroyo, Tal Burstein, Eliyahu o Charles Gaines. Todos ellos han abandonado la entidad hebrea y han sido sustituidos por otros como los escoltas Andrew Wisniewski y Chuck Eidson o los aleros Alan Anderson o David Bluthenthal.

Eidson y Fischer, las estrellas

Pero de todos sus jugadores, destacan en sobremanera dos. El primero es el anteriormente nombrado Chuck Eidson, escolta norteamericano que está promediando 13,1 puntos y 4,5 rebotes en la Euroliga. Este hombre realizó una valoración de 34 en el partido que su equipo disputó ante la Lottomatica de Roma el pasado día 7 de enero, por lo que el Real Madrid deberá tenerle muy en cuenta de cara al encuentro del jueves.


En cuanto al segundo nombre, se trata del pívot D´or Fischer. Este poderoso 'center', de 2,11 metros, ya participó en los encuentros de la pasada temporada ante el Real Madrid, por lo que se le conoce bastante bien. Se trata de la verdadera referencia interior del conjunto maccabeo, aunque esta campaña está promediando unos discretos 5,6 puntos y 4,7 rebotes en la competición europea.

En resumen, el actual Maccabi es un buen equipo que, hoy en día, dista mucho de aquél que ganó tres Euroligas en cuatro años. Su plantilla carece de grandes nombres y destaca por la madurez de la mayoría de sus jugadores (rondando la treintena) y por la ausencia flagrante de centímetros en la zona. Sin embargo, desde el perímetro el equipo tiene mucho peligro, pues jugadores como Eidson o Wisniewski son capaces de sacar su muñeca a pasear en cualquier momento. Esto, unido al ambiente infernal del pabellón Nokia Arena (La mano de Elías), los convierte en un conjunto correoso, aunque, sobre el papel, inferior a los de Messina.