La temporada pasada los partidos ante el equipo catalán fueron un suplicio para los de Messina. El balance fue demoledor en contra del Real Madrid: 7-1 entre Supercopa, Copa, ACB y Euroliga. Sin embargo, las cosas han cambiado radicalmente. Ahora la balanza está más igualada. El Madrid ha mejorado con el fichaje de jugadores como Fischer o Suárez y el Barcelona ha visto mermado su potencial debido a las lesiones de hombres como Mickael o Basile y las molestias de Navarro.
En el gran clásico del baloncesto español, habrá más que una victoria en juego. Y es que el Barcelona-Real Madrid decidirá quien acaba el año 2010 en lo más alto. Por este motivo y por las últimas derrotas cosechadas por los blancos en el Palau blaugrana, es por lo que a buen seguro el Madrid saldrá con más ganas que nunca a conquistar el feudo de su eterno rival.
El momento en el que llegarán los madridistas será, desde luego, inmejorable: líderes y reforzados moralmente tras la victoria en otra de sus canchas malditas, el Buesa Arena. La primera prueba en defensa del liderato ya se superó, habrá que ver ahora si el equipo de Messina es capaz de dar otro paso de gigante y defenderlo de nuevo ante el Regal Barcelona.
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