El entrenador me gusta. Las pocas veces que le he oído hablar he comprobado que no ha venido a 'vender la moto' a los aficionados madridista. Un hombre directo y sincero. Lejos del perfil de técnico 'estrella' de Messina. Mi primera impresión con Laso era de escepticismo. No le creía capaz de llevar un "devora-técnicos" como el Madrid de baloncesto. Pero he comprobado que es un tipo sensato y ha puesto mimo a la hora de confeccionar la plantilla.
Un equipo en el que Rudy será la guinda, pero que no creo que sufra demasiado su ausencia cuando el balear retorne a la NBA. No digo que el escolta sea prescindible sino que la idea de este año no puede ni debe girar en torno a él. Porque creo que si se marcha Rudy vendrá el ansiado alero alto y porque hay jugadores que con un año más pueden dar un salto de calidad importante. Hablo, como no, de Mirotic, aunque pienso que Llull, Suárez, Velickovic e incluso Sergio Rodríguez aportarán bastante más.
Y luego están los fichajes. Carroll me encanta. Si se adapta a un equipo de la exigencia del Real Madrid, sus tiros desde la media y larga distancia abrirán defensas y obligarán a los rivales a no abusar de las zonas defensivas. Pocius es un multiusos. España ya le ha sufrido en sus carnes en el Europeo. Defiende, penetra, tira y trabaja. Mucho mejor de lo que, a priori, pudiera parecer.
Y ahí si se acaban los fichajes. ¿Seguro? Creo que no podemos obviar a un Velickovic recuperado para la causa que, si se restablece de su lesión sorprenderá a mas de uno, y tampoco a Begic, que tendrá ahora una oportunidad de oro para mostrar lo que vale. Éstas son las razones por las que creo que que con o sin Rudy, el basket madridista tiene un buen plan.
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