Florentino, una gran decisión

El primer día tras el regreso al Palacio de los Deportes demuestra que ha sido un acierto





Tras la salida del Palacio de Vistalegre, el listón estaba muy alto, Por eso, la aventura en la Caja Mágica solo duró una temporada. Y es que el pabellón de San Fermín era magnífico en cuanto a instalaciones y posibilidades, pero no estaba pensado para albergar baloncesto. Su mala comunicación y accesos, unidos al hecho de que el ambiente en la cancha era muy frío, provocó que el madridismo no terminara nunca de encontrarse a gusto en su nuevo feudo.

Por ello, el Real Madrid escuchó a sus socios y abonados y procedió a arreglar el problema. En una gran maniobra de gestión, la directiva merengue logró que el club blanco y el Ayuntamiento rescindieran el contrato que los unía para que el equipo jugara en la Caja Mágica. Y todo, sin ningún tipo de perjuicio económico para el Real Madrid. A cambio, los de Pablo Laso se irían a jugar al mítico Palacio de los Deportes, lugar donde el conjunto merengue pasó una parte importante de su historia en la década de los 80 y 90.

Y, por fin, el reencuentro se produjo este domingo con un gran éxito de afluencia y un buen espectáculo en la cancha. Cerca de 9.500 espectadores acudieron al pabellón situado en la madrileña calle de Goya para disfrutar de la victoria merengue sobre el Fuenlabrada. Una afluencia de público que igualó a la de las mejores noches vividas en la Caja Mágica, y similar a la habitual en el Palacio de Vistalegre. De esta manera, se confirmaba que la decisión ha sido buena y que su nueva casa puede ser pieza fundamental en los éxitos que le esperan al equipo.