Un partido para vivir sin sobresaltos

El grupo es una trampa continua, pues junto a madrileños y malagueños también están el Gescrap Bilbao y el Montepaschi Siena. En estas condiciones, cualquier victoria a domicilio es media clasificación para los cuartos de final de la competición, por lo que los de Pablo Laso intentarán empezar de la mejor manera posible ganando en el Martín Carpena de Málaga. Algo que ya consiguieron hace un par de meses al imponerse por un engañoso 80-96.

La premisa básica con la que el Real Madrid afrontará el choque será la de intensidad. Los cuatro precendentes entre ambos equipos en la Euroliga indican que los locales siempre se llevaron el partido, de manera que los blancos intentarán romper con la historia. A su favor contarán con las numerosas bajas que presentará el Unicaja, ya que Chus Mateo no podrá contar con Joel Freeland, Álex Abrines y Tremmell Darden y Mark Payne y Peric serán duda hasta el último momento.

En el Madrid estarán todos con la única duda del serbio Novica Velickovic. El ala-pívot no termina de recuperarse de sus problemas en la rodilla y podría entrar en la convocatoria de Laso para el choque. Pero en la misma no faltarán Carroll, Pocius o Singler, jugadores clave en las últimas victorias madridistas y cuyo papel se antoja fundamental para contrarrestar el juego de Rowland, Fitch o Garbajosa. El premio por la victoria sería vivir sin sobresaltos en los siguientes encuentros, por lo que el de Málaga es un choque clave para conseguir el sueño de estar en la Final Four de Estambul.