Mirotic no se cansa de ser el héroe

A pesar de que el primer triple del partido llegó a cargo de Rudy, el Real Madrid no tuvo su mejor día en Lituania. Al menos, no tuvo la regularidad que debe tener un equipo que aspira a conquistar Europa. El Zalgiris puso contra las cuerdas al equipo de Pablo Laso durante todo el partido, y no se acabó llevando el triunfo gracias a que Mirotic se puso las pilas a tiempo. Con un principio y un final de gran nivel, los lituanos llevaron el peso del encuentro y los blancos fueron a remolque para acabar logrando la victoria casi milagrosamente.

Los locales se adueñaron del partido desde el comienzo. Tras unos instantes de igualdad, un parcial de 8-0 desequilibró el electrónico y llevó al Madrid a perder por 10 de diferencia al término del primer periodo (29-19). El Zalgiris supo atacar el aro madridista y se defendió bien de un Madrid gris, con pocas ideas hasta ese momento. No obstante, no todo estaba perdido y el equipo blanco comenzó a remar y a remar para buscar la remontada, un premio que llegaría pero que podría considerarse excesivo vistos los méritos del equipo de Joan Plaza.

El segundo y el tercer cuarto fueron para los blancos, que lograron a base de trabajo igualar el partido. Con el mono de trabajo puesto, las cosas salen mucho mejor y eso fue lo que consiguió Laso con su charla tras los primeros diez minutos. Sin embargo, el segundo acto comenzaba mal de nuevo para los merengues, que no conseguían frenar la sangría. El Kaunas se marchó hasta los 14 puntos de ventaja, mientras que un Rudy desconocido no conseguía echarse al equipo a la espalda. Desacertado Rudy y en este cuarto también Carroll, hubo de ser Mirotic quien empujara al conjunto blanco para reducir diferencias (44-40).

En el tercer cuarto sí aparecieron los escoltas blancos, que comenzaron a 'coser' a triples al Zalgiris para lograr ventaja antes de alcanzar los últimos diez minutos (61-63). Si la remontada había sido complicada, pronto dio la sensación de que el Madrid nadaba para ahogarse en la orilla. El Zalgiris retomó el mando en el último cuarto para lograr una ventaja de 7 puntos a falta de poco más de un minuto (81-74). No obstante, los instantes finales del partido iban a dejar claro el espíritu de lucha de los blancos, que lograron igualar para forzar la prórroga gracias a un sublime Mirotic (seis puntos y un rebote ofensivo crucial) y a un parcial de 3-10.

La prórroga fue quizá el periodo más igualado del partido. Los blancos lograban escaparse y los lituanos se acercaban peligrosamente, hasta el punto de que convirtieron un 99-105 en un 104-105 en apenas diez segundos, los últimos del encuentro. Por suerte, el crono marcó el final y con él un nuevo triunfo en Europa del Madrid, que ya casi es equipo de play off.