El presidente del PSG vivió ayer uno de los días más difíciles de su vida.
El tiempo y la vida dan muchas vueltas, por lo que el destino de muchas personas es realmente incontrolable, algo que puede suceder con Nasser Al-Khelaïfi.
El presidente del PSG ha vivido unas últimas horas realmente complicadas, después de que se conocieran informaciones que le están dando la vuelta al mundo, como era de esperarse.
Nasser Al-Khelaïfi primero tuvo que afrontar el 'caso Mbappé' en la presentación de Luis Enrique, nuevo entrenador del club parisino.
Sin embargo, esto no es todo, ya que cuando se estaba presentando al asturiano, la casa del presidente del PSG estaba siendo registrada por los cuerpos de seguridad de Francia, lo que deja clara la razón por la que se dilató hasta 3 horas la puesta de largo del técnico español.
"El juez de instrucción pidió información complementaria y acceso, que se le facilitó con total transparencia y en plena cooperación con las autoridades, como ha sido el caso desde el principio", declaró un portavoz del PSG a AFP.
Nasser Al-Khelaïfi está siendo investigado por un presunto secuestro y tortura al lobista Tayeb Benabderrahmane, quien presentó una denuncia contra la personalidad qatarí.
El denunciante alega que presuntamente fue detenido durante seis meses e interrogado por agentes locales, en particular sobre documentos que supuestamente poseía y que podrían comprometer al jefe catarí del PSG.
Los abogados de Nasser Al-Khelaïfi ya anunciaron el pasado mes de abril la intención de presentar una demanda por difamación, ya que claramente esto es un caso que perjudica su imagen, así como la del equipo francés.
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