Recital de Linda Caicedo y Teresa Abelleira para asegurar la segunda plaza en el di Stéfano

Las pupilas de Alberto Toril supieron responder a la perfección a uno de los partidos más exigidos del calendario


Nueva victoria del Real Madrid Femenino en casa

Nueva victoria del Real Madrid Femenino en casa




El partido, un derbi madrileño, no podía empezar de peor manera para las pupilas de Alberto Toril. Cuando basculaban el balón de un lado a otro, un mal despeje de Misa dejaba a Bonsegundo la portería vacía a los 30 segundos de partido para adelantar al Madrid Club de Fútbol Femenino. Este golpe inicial dejó ligeramente noqueado al Real Madrid, que resistió bien los primeros embates del equipo visitante y se volvió hacia una de sus jugadoras más determinantes.

Linda Caicedo se ha convertido en la futbolista total que guía al Real Madrid sobre el terreno de juego. Con apenas 18 años, la colombiana lo hace prácticamente todo: atacar, defender, crear juego y presionar arriba. También hizo el primer gol después de una buena jugada colectiva, definiendo con pierna izquierda para poner las tablas en el minuto 7. Sin embargo, el Madrid Club de Fútbol Femenino llamó a filas a su gran baluarte en ataque: Racheal Kundananji.

La '3' fue el gran peligro para la defensa del Real Madrid durante toda la primera mitad gracias a su velocidad en carrrera y finura con el balón, ofreciéndose como una forma de contrarrestar el dominio de pelota que proponía el Real Madrid como plan de partido. Precisamente Kundananji fue la responsable de 'castigar' uno de los pocos errores de la defensa madridista en el Alfredo di Stéfano para poner un 1-2 que no duraría mucho. Linda Caicedo fue de nuevo clave en el gol de Teresa Abelleira, presionando la salida de balón visitante y habilitando a la centrocampista blanca con un balón raso que Caroline Weir dejó pasar de manera muy inteligente

De menos a más

El plan de partido de Alberto Toril propuesto en la primera mitad continuó durante el segundo periodo. Los últimos 45 minutos arrancaron con el Real Madrid jugando con una defensa de tres centrales, un sistema algo más profundo y líquido que permitía mayor movilidad a las futbolistas de tres cuartos de cancha. Las delanteras blancas comenzaban a hacerse con el ritmo del partido ante un Madrid CFF que no parecía oponer resistencia. Fruto de este dominio llegó el segundo golazo de Teresa Abelleira desde fuera del área y directo a la escuadra para poner el definitivo 3-2.


El dominio del Real Madrid se consolidó con el paso del tiempo y Alberto Toril decidió rotar posiciones y dar inicio a las sustituciones. Las jugadoras blancas retornaron a la defensa de cuatro con la entrada de Olga Carmona, Feller o Freja Siri, entre otras jugadoras. Con el cronómetro en contra, el Madrid Club de Fútbol Femenino intentó un último arreón contra la portería de Misa pero las de Alberto Toril supieron ajustar la defensa para abortar las últimas salidas en transición de una desaparecida Kundananji y asegurar una nueva victoria, ajustada y muy trabajada, para consolidarse en la segunda posición de la Liga F.