Llorente alegró el debut de Ramis con un gol que valió los tres puntos

Victoria de gran valor del filial gracias a un solitario tanto del centrocampista





El inicio del choque estuvo marcado por el buen comienzo del C.D. Ebro. Los aragoneses querían lavar la imagen mostrada en el partido de la primera vuelta en el que cayeron goleados por 5-1, por lo que asediaron la portería de Carlos Abad desde el primer minuto. Hasta tres córners tuvieron los locales en los 13 minutos iniciales, aunque el filial merengue supo aguantar este asedio y poco a poco fue encontrándose más cómodo sobre el terreno de juego. Esto permitió que el equipo se estirara y buscara el marco rival en jugadas aisladas provenientes de saques de esquina y faltas laterales.

La igualdad era máxima, pero el Castilla hizo valer su mayor calidad para adelantarse al filo del descanso. Marcos Llorente logró colocar el balón en las mallas rivales tras incorporarse con acierto al ataque, por lo que el conjunto merengue se fue con un preciado botín al descanso. Por delante les quedaban 45 largos minutos en los que iban a tener que sufrir para lograr los tres puntos, ya que el Ebro continuó apretando con mucho juego directo. Los locales dispusieron de un buen número de córners y faltas próximas al área merengue para intentar lograr el empate e incluso Konare estrelló el balón en el larguero en un mano a mano con Abad en el minuto 80.

Pero por fortuna el marcador no se movió y Ramis selló con un buen triunfo por 0-1 su debut como técnico del Castilla. Tres puntos al bolsillo que permitirán que el filial duerma una semana más como segundo clasificado del Grupo II, aunque con opciones de recortar alguno de los cuatro puntos de ventaja que le llevaba hasta hoy el líder, el Barakaldo. Los vascos recibirán al quinto de la tabla, el Toledo, por lo que el equipo blanco está ante una buena opción de terminar la jornada a un partido de distancia de su gran rival.