El Juvenil A estará en la final de Copa

Un gol en el minuto 95 de Dani Gómez mete al conjunto merengue en la final de la competición copera


Un jugador del Juvenil A durante el partido contra el Villareal

Un jugador del Juvenil A durante el partido contra el Villareal




El Juvenil A del Real Madrid afrontaba el partido contra el Villarreal correspondiente al encuentro de vuelta de las semifinales de la Copa del Rey de la cateogría después de empatar a uno la semana pasada en Valdebebas. Los muchachos de Santi Solari salieron desde el primer minuto con la idea de dominar el encuentro y conscientes de que tan solo hacía falta un gol para pasar la eliminatoria, pero las cosas pronto se iban a torcer. 

Cuando apenas se llevaban 17 minutos de partido, el delantero del Villarreal, Akele, definió a la perfección un mano a mano ante el cancerbero merengue, Luca. El Real Madrid reaccionó a las mil maravillas y tres minutos después, el lateral derecho internacional por Marruecos, Achraf, marcaba el tanto del empate. El equipo de Solari dominaba el encuentro, tenía la posesión y las ocasiones más claras, mientras que el Villarreal aprovechaba los errores del del Juvenil A para salir a la contra y meter el miedo en el cuerpo al conjunto blanco. 

Precisamente así llegó el 2-1 del submarino. Ya en la segunda mitad, un robo en la salida de balón del Real Madrid lo aprovechó el Villarreal para realizar una triangulación que fue culminada en el minuto 56 de partido por Villa. Tal y como ocurriera en al primera mitad, los blancos tuvieron la posibilidad de empatar al poco de encajar el gol. Rivero 'cazó' un balón suelto en el área, pero el cancerbero del conjunto valenciano logró con una grandísima parada desbaratar la oportunidad. 

Tratándose del Real Madrid, no podía faltar una expulsión. En el minuto 71, justo cuando mejor estaba el Juvenil A, el colegiado echó al capitán merengue, Javi Sánchez, tras recibir la segunda amarilla en una acción un tanto polémica. Y es que si ya de por sí la tarjeta se la podía haber ahorrado, justo antes de que se produjera la acción, el árbitro no señaló hasta tres faltas consecutivas a favor del equipo merengue.

El Juvenil no se desconcentró a pesar de la expulsión. Sabían que un gol los metía en la final y se fueron a por él. Ni el calor, ni el cansancio acumulado ni el hecho de jugar con un futbolista menos impidieron que el Real Madrid logrará el objetivo. Cuando apenas quedaban segundos para que el árbitro señalara el final, Dani Gómez destaba la locura en el bando merengue con un gol que lleva al equipo blanco a Mallorca.